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Una sección de Sebastián Manuel Gallego Morales

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BRAULIA RAMOS, MATRONA

Nace Braulia Ramos Alarcón el 12 de Octubre de 1923 en esta ciudad de Baza, siendo la menor de los cuatro hijos habidos en el matrimonio de José Ramos Esteban y Braulia Alarcón Manzano. Su madre, emparentada directamente con el escritor accitano Pedro Antonio de Alarcón, y su padre, oriundo de Alicante, asiduo lector de los clásicos y cuya filosofía era la "verdadera virtud y sabiduría no está en el banco, sino en los libros de tu estantería". No esperaban que esta pequeña "corribulle", como le solía llamar su madre, fuese pronto una más en el seno de una familia bastetana en la que su hermano Benito se decantaba por el canto de las zarzuelas que se representaban en el Teatro Dengra, que en aquellos tiempos era un referente en todos los acontecimientos musicales y artísticos de la ciudad.

"Llegó la Guerra Civil y las terribles secuelas asolaron mi familia, que lo pasó mal, muy mal, al igual que otras muchas familias bastetanas de ideología diferente al ganador de la contienda. Fueron años muy difíciles en la vida familiar, pero pude comenzar mis estudios profesionales y dedicarme a lo que con una absoluta vocación ha sido siempre el trabajo de toda mi vida", nos cuenta Braulia. "Primero estudié la carrera de Practicante, en la Facultad de Medicina de Valencia, y seguidamente la de Matrona en la Facultad de Medicina de Granada, con calificación global de Sobresaliente". Eso sí, siempre con el deseo interior de ejercer ambas profesiones en Baza, su pueblo.

Más tarde vinieron las oposiciones de APD (Asistencia Pública Domiciliaria) y de A.T.S. Y otras muchas que unió a su amplísimo expediente. Su gran dedicación personal y profesional ha sido traer a este mundo a gran parte de los bastetanos que son hoy a su vez, padres o madres. Durante los treinta años en que ejerció de Matrona en esta ciudad, habrá asistido aproximadamente unos seiscientos partos anuales, tanto de particulares, como de la beneficencia del Ayuntamiento.

"No era época en la que existieran 'turnos de trabajo', ni se conocían los días de fiesta o vacaciones en mi profesión. Los profesionales estábamos las 24 horas del día dedicados plenamente a nuestro trabajo", recuerda Ramos, " si una señora se ponía a dar a luz, tenía que ser atendida, aunque ya antes se hubiesen atendido otras 6 o 7 más".

Braulia Ramos recuerda las inclemencias del tiempo, y la falta de recursos para trasladarse a las casas o a las cuevas de esta ciudad, caminos embarrizados: o cuando no en la moto de su marido a las cuatro de la madrugada, nevando y en pleno mes de Enero. Son recuerdos duros, a la vez que recuerdos gratos, "ver la alegría y satisfacción con la que los familiares de la parturienta me recibían, qué miradas de agradecimiento de esas futuras madres que necesitaban de mi ayuda para seguir viviendo y dar vida a su hijo. Eran razones, para mí, más que suficientes para darme ánimo y que me gratificaban inmensamente reasegurándome en mi vocación profesional".

En general podríamos decir que Braulia Ramos habrá traído al mundo, como mínimo, entre Baza y su comarca, la cantidad de 16.000 o 17.000 niños, "y, creo que me quedo corta, porque en el viejo Hospital de Santiago también se asistían un buen número de partos a mujeres procedentes de Tíjola y Serón, y anejos y cortijos de la zona limítrofe de la provincia de Almería". Cuantos casos y casos recuerda en El Perchel, La Jamula, Estación de Serón, Los Zoilos, y otros muchos nombres que hoy incluso no recuerda. Y de Baza... "si he asistido a domicilio a parturientas en La Ribera, Las Siete Fuentes, El Copetín, El Baíco y todas las cuevas (de la Arena, Garfios o Rodeos). En todos mis trabajos de asistencia, tengo el orgullo de poder decir, que pese a todas las dificultades técnicas y condiciones incluso de precariedad, los niños y sus madres salieron adelante".

Sin duda, el mayor sentimiento de Braulia fue tener que irse de su pueblo, de Baza. "No puedo callar que mi marcha tuvo que ver con mi forma de pensar siempre a favor del que menos tenía" y en años en que muchas personas carecían de lo indispensable. "Como me dolió que una persona con poder político y administrativo solicitara mi cese. No me quedó más recurso que reiniciar mi vida optando a una plaza en la Maternidad de Granada, donde fui recibida con los brazos abiertos. Allí saqué mi plaza en propiedad con el nombramiento de Matrona Titular de Centro Maternal de Granada, Virgen de las Nieves".

No quisiera dejar sin mi reconocimiento a D. José Martínez Mancebo (Tocólogo), que me inició en la andadura real de la profesión, y destacar la figura de D. Arsenio Moreno Castillo (Ginecólogo), de quien he constatado su calidad humana y profesional, que ha dejado una huella imborrable en Baza".

 

Trayectoria vital y laboral reconocida

A principio de los años 80, la Cadena COPE, en su programa "Protagonistas" con Luis del Olmo, seleccionó las trayectorias profesionales más ejemplares en diferentes trabajos, teniendo la satisfacción de ser la elegida a nivel nacional como matrona. Pero no ha sido ese el único homenaje recibido. "Tuve el honor de recibir uno en Granada, en el que se me reconocía mi labor profesional y la lucha por el reconocimiento del trabajo de las matronas en la sociedad. Fue reconocida por la Delegación de Salud y por todos los colegios del ámbito sanitario, entregándoseme como galardón la estatua de Miró "La Maternidad".

"En el año 1982 fui galardonada con el nombramiento de 'Bastetana Ausente', que me llenó de orgullo y me reconcilió con mi tierra. Cómo es posible que se haya suprimido ese bonito galardón, cuando somos miles los bastetanos que estando por circunstancias ajenas fuera de la tierra, la amamos, tanto o más que los que siguen en ella", lamenta Braulia Ramos