Pregón oficial de la Feria y Fiestas de Baza 2024

PRIMERA PARTE:

Biografía bastetana de Miguel Ángel Santa-Olalla Viñegla, leída por el alcalde bastetano en su presentación del pregonero:

1. Hijo de Antonia Viñegla Almela y de José Manuel Santaolalla Morales. Nació en un ya lejano y frío mes de enero bastetano del año 1959 en la Calle Corredera, en el nº 15. Justo enfrente de la vivienda donde seguramente nació ‒y desde luego creció y vivió‒ el ilustre cronista de Baza Ricardo Cañabate, autor de una auténtica joya de la lexicográfica hispánica. Así es, en efecto, porque su libro Menés, en el que se refleja el tradicional habla bastetana, se merece, sin duda alguna, ocupar un hueco en un estante de la extensa biblioteca de la Real Academia Española, si no lo ha ocupado ya por derecho propio.

[SALUDO]

  • Por este riguroso y, a la vez, divertidísimo libro se toma la libertad de darle públicamente la enhorabuena en el nombre de sus todos los bastetanos y le saluda cordialmente porque estará en esta sala cubriendo el evento que nos ha traído hoy aquí.

[PAUSA EN LA LECTURA DE UNOS SEGUNDOS, SEÑOR ALCALDE, POR FAVOR]

2. En la mencionada casa que fue su cuna contó con la dirección espiritual inflexible de dos mujeres temibles donde las haya habido, a saber, su madre Antonia Viñegla y su tía María Luisa Quera,  que guiaron sus pasos con mano firme y exhibiendo inigualables dotes de mando. Porque mandar y ser obedecidas eso venía en ellas “de serie”, como se dice ahora. Además, ambas fueron las que más le regañaron cuando llegaba a sus oídos que había hecho alguna trastada, algo frecuente en su inconsciente infancia. Hoy, con la perspectiva que le da el largo tiempo vivido,  ha comprendido que si su madre y su tía le regañaron con aquella intensidad y aquella energía irresistibles fue porque lo querían de veras.

[SALUDO]

  • Y por aquella constante dedicación que su madre Antonia y su tía María Luisa que se tomaron para educarle, allá donde estén ahora ‒si es que están en lugar alguno porque ese es un buen tema para debatir‒, tiene hacia ellas un emocionado recuerdo y las saluda mientras alguna que otra lagrimilla fluye de sus ahora ya envejecidos ojos.

[PAUSA EN LA LECTURA DE UNOS SEGUNDOS, SEÑOR ALCALDE, POR FAVOR]

3. En los primeros años su mundo, como el de cualquier niño, se ciñó a la vida en familia, que, en su caso, incluye a sus dos hermanos de los que, por desgracia, sólo vive uno, Aureliano. Y, naturalmente, incluye a sus cuatro primas ‒más bien, hermanas, que primas‒, Elisa, Mari, Manoli y Vivi Ros Viñegla.

[SALUDO]

  • Así, pues, a los mencionados, sus cinco hermanos Viñegla vivos, igualmente los saluda por si alguno de ellos estuviera presente. Y si no ha venido ninguno, será porque tendría algo más importante que hacer y aquí no pasa nada.

4. Pero pronto se vio arrojado al cruel mundo de la Calle Corredera, entonces Carretera Nacional con un densísimo tráfico de vehículos pesados y una vida comercial y hostelera envidiable. Y, también, en este ambiente callejero conoció a sus primeros amigos, a cuál más atrevido, que, de alguna manera, marcaron su vida. Entre ellos, destacará a Jorge Sotelino, a Francisco Espín (alias “Fran”), a José Domingo Utrera ‒conocido periodista local‒ y ¡cómo no hacerlo!, a su hermano Manolo. Y junto a estos, confiesa que perduran en su memoria entrañables amigos como Antonio Jesús Muñoz,  Juanico el del Siglo XX, y el que siempre fue para él insuperable por su osada temeridad Gregorio Domene. Finalmente,  sería un gravísimo error olvidarse de “Estebican”, ya fallecido, y de su hermano Vicente, hoy un excelente profesional del cortinaje con un gusto exquisito. No fueron los únicos, hubo otros muchos cuya relación es imposible hacer aquí y, por no mencionarlos, les pide anticipadas disculpas.

[SALUDO]

  • A todos ellos igualmente les saluda por si alguno estuviese presente esta tarde entre nosotros.

Con ellos jugó durante años al aro, a las chapas, a las bolas, al bárbaro “rompe-trompas”  y al más salvaje todavía juego del clavo, del que por suerte salieron todos ilesos sin que ninguno de sus amigos ni él mismo, en alguna de aquellas violentas tiradas con una barra de hierro de amolada punta,  se atravesasen un pie de parte a parte.

[ENFATIZANDO, CON TONO DE EXCLAMACIÓN, ALCALDE, POR FAVOR]

¡Ah, qué delicia recordar hoy aquellos juegos infantiles, algunos ciertamente tan peligrosos que ningún padre de hoy, más cobarde que responsable, dejaría que sus hijos jugaran y se divirtieran como lo hicimos nosotros!

¿Verdad, Fran? Porque nosotros, ¡con casi nada!, fuimos más felices que los niños de hoy teniendo tantas cosas que en la vida real no sirven absolutamente para nada.

[PAUSA EN LA LECTURA DE UNOS SEGUNDOS, SEÑOR ALCALDE, POR FAVOR]

5. Y eso por no contar al auditorio que muchos, si no todos,  portaban en sus bolsillos unas afiladas navajas de hoja fina de unos diez centímetros aproximadamente y que hoy  ‒en esta sociedad tan estúpida y timorata que hemos contribuido a crear‒ están rigurosamente prohibidas. Pero quiere recordar a sus queridos paisanos aquí presentes, que aquellos zagales listos y traviesos, esgrimiendo aquellas amenazadoras armas blancas, no le temían ni a los churris ‒así llamaban ellos entonces a los policías locales‒ ni al mítico “hombre del saco”. Y si es que este señor hubiera venido a por alguno de ellos, se habría ido de vacío y con algún navajazo encima.

En síntesis, concluye que los zagalillos que se criaron en la Corredera y en las anexas Carreteras de Granada y Murcia forjaron una forma de ser y un temperamento que les ha sido muy útil para el triunfo en su vida posterior; en “la lucha por la vida”, “the struggle for live que diría Charles Darwin, si estuviera hoy aquí con acento anglosajón.

Y le consta al que esto escribe que sus rivales naturales, sus coetáneos que vivían en el Barrio de Santiago ‒como el entorno de la Calle Corredera, hoy en franca decadencia‒ comandados, por Antonio Plaza y su hermano Manuel,  ya fallecido también, es decir,  “los Centeniles”, con el valiente Manuel Durán “El Piri”, al frente, y Guillermo Torres, en la retaguardia, que para eso era todo un Marqués y había que protegerlo, eran tan buenos como ellos, si no más, en todas estas actividades lúdicas, siempre pacíficas, salvo que…

[PAUSA LARGA, A TU GUSTO, ALCALDE, Y ACOMPAÑADA DE CARA DE SORPRESA, COMO SI TE SORPRENDIERA LO QUE VAS A LEER.

MUCHAS GRACIAS]

Salvo que:

hubiesen concertado entre ambos grupos una guerra de guerrillas, a pedrada limpia, por supuesto, y a una hora convenida de la tarde. Sin embargo, esta deportiva y animada competición tenía muy saludables reglas porque ni unos ni otros ‒aunque alguien erróneamente piense lo contrario ‒eran vulgares “ovejos”, en el preciso sentido que da a este término bastetano Ricardo Cañabate en su excelente libro, concretamente en la página 172, para quien quiera consultarlo.

¡Todo lo contrario, todo lo contrario! Los zagales de la Corredera y de Santiago, queridos bastetanos, tenían mucho seso dentro de sus todavía blandas y poco ilustradas “molleras”. (Este vocablo ha notado que falta en el citado libro de Ricardo y le sugiere al autor incorporarlo, si él así lo estima conveniente, en la segunda edición que, por sus grandes amigos Mati Magdaleno y Antonio Vallejo, sabe que anda preparando.) Y una de tales saludables reglas era que estaba prohibido utilizar tirachinas. Naturalmente, y se prohibía por su dañina repercusión si, por rara casualidad, una “china” acababa vaciándole un ojo a cualquier rival, siendo este un efecto colateral nunca deseado por tan nobles combatientes. Por otra parte, para los de la Corredera era mejor que no se usasen porque al que escribe le consta que el mencionado Manuel Durán “El Piri” era un tirador de tirachinas con una puntería inmejorable. Por último, han de saber los oyentes que ésta muy cívica competición se celebraba siempre en la Huerta Miranda que hoy, como entonces sigue siendo la zona deportiva de Baza en donde se asienta el magnífico Pabellón cubierto.

¡En fin, la Baza eterna que no cambia nunca!

6. Concluido este alegre periodo, pasó al Instituto “José de Mora” y allí comenzó otra fase muy importante de su vida. En dicho instituto aprendió también lo que son las buenas bofetadas que a uno le da la vida si hace algo mal y se esforzó por recibir las mínimas de sus profesores. No obstante, recuerda una verdaderamente grandiosa que en la primavera de 1973 le fue propinada en un aula que los alumnos llamaban “Vietnam” por el profesor de Religión D. Rafael Ortiz, que enseñaba Dogma y Moral Católicas, pese a ello, para él, de muy grata memoria. Aquella fue, sin duda, la mejor, la más sonora y la más fuerte bofetada que ha recibido nunca. No podría ser de otro modo, porque aquel profesor, al ser un gran sacerdote, era también un especialista en repartir hostias…

[PAUSA OBLIGADA, ALCALDE, PARA QUE QUIEN QUIERA SE RÍA A CARCAJADAS. Y TÚ ESPERAS A QUE SE TERMINEN DE REIR Y SIGUES LEYENDO]

las unas,  consagradas… las otras, no tanto.

7. Y con el amplio bagaje de este didáctico aprendizaje, primero en la Calle Corredera y luego en Instituto “Jose de Mora” ya quedó preparado para todo lo que hizo después: estudiar Filosofía y ser profesor de la materia que fue al final su profesión.

[RECONOCIMIENTO PERSONAL Y SALUDO A MERCEDES]

8. Mención aparte merece el exigente reto que le supuso vivir con Mercedes Lozano Valdivieso. Algo que no resultó tarea tan fácil como él pensó en un principio, ni lo sigue siendo hoy. Y es que ella quiso tener cuatro hijos y como él no podía con su firme insistencia, pues accedió gustoso a un empeño tan placentero. Y después, durante exactamente treinta y seis años, lo que vino no fue tan placentero porque ambos tuvieron trabajo de sobra para criarlos y preocupaciones innumerables para educarlos de modo que fuesen eligiendo por sí mismos  el rumbo de sus respectivas vidas. Y por su esfuerzo impagable como madre, por su amor fiel como esposa y por haber sido desde que la conoció su eterna amiga quiere aquí agradecerle su tenaz esfuerzo y saludarla, si es que se encuentra presente hoy en esta sala.

9. Y por lo demás, solo añadir que ha podido escribir ya seis libros de ensayo filosófico, superándose siempre a sí mismo. En efecto, porque cada libro que ha escrito es peor que el anterior y de ahí lo de su continua superación. Y aunque los bastetanos los tienen todos estos en su magnífica Biblioteca Pública porque ya se ha preocupado él de que así sea,…

su autor,  recomienda vivamente a los presentes que no pierdan su precioso tiempo leyendo ninguno de sus libros porque son muy aburridos, y que, en cambio,

busquen, adquieran y lean:

El que ha escrito una muy buena amiga suya, compañera y esposa de su también amigo, ya citado al principio, Gregorio Domene,…

busquen, adquieran y lean:

El libro de una bastetana de raza que se llama María Piedad Hernández, cuyo título es Las mentas del verano y que es, en opinión de sus escasos lectores hasta ahora, una pequeña obra maestra. Y es cierto, es un libro escrito con un oficio y un estilo solo dignos de alguien como Piedad, con un talento natural envidiable para la escritura narrativa.

. Y por supuesto que, si está presente, la saluda también con todo su afecto.

[CONCLUSIÓN]

Y eso es todo. Quiere añadir que si en su vida ha hecho algo valioso ‒extremo éste que sinceramente ignora‒, ha sido porque ha tenido la gran suerte de conocer y convivir con todas esas personas y con otras muchas, la mayoría bastetanas, ¡Mire usted qué casualidad! Todas ellas han contribuido, bajándole los humos, a hacer de él una persona modesta y no un imbécil cargado de títulos.

En Baza siempre, a 31 de julio del año 2024.

Fdo. Miguel Ángel Santa-Olalla Viñegla

 

PREGÓN OFICIAL DE LA FERIA Y FIESTAS DE BAZA 2024

1. Aclaraciones previas

1ª) Este no es un pregón al uso, sino el primer acto de diversión de la feria del año 2024 y es un pregón dirigido a una generación, la de los nacidos desde finales de los años 50 a mediados de los años 70. Los del Babyboom que ahora nos estamos jubilando. Es un pregón por ello altamente colectivo y dirigido a este colectivo y es este colectivo quien mejor va a entender este pregón. PORQUE colectiva es su composición, plagada de aportaciones ajenas, colectivas sus ideas, colectivas en sus utópicas propuestas finales, y también colectivo porque aquí vamos a participar todos, los alcaldes incluidos y hasta colectivo en mi vestimenta que no es mía, porque este traje que llevo fue el último que la empresa Selinac de mi prima Manoli Ros y de Pedro Quesada, su marido, confeccionó para su padre, mi tío Manolo Ros ¡Más grande en sentido humano que yo como de aquí a Lima! Traje que os confesará que no llegó a estrenar y que entreno yo por él esta noche. Y en cuanto a mi primo Pedro Quesada, aunque falleció, como sabéis trágicamente, para mi prima Manoli SIGUE VIVO. De donde se sigue, en amorosa lógica familiar irrebatible, que si mi prima quiere que Pedro esté vivo, y yo quiero lo que quiera mi prima Manoli pues entonces se concluye, por Modus Tollens Familiae, que para mí TAMBIÉN está vivo y no se hable más Accitanos y bastetanos todos, porque ese silogismo hipotético familiar está perfectamente concluido.)

2ª) El diseño estratégico de este pregón no se debe a mi sino a un buen amigo mío, experto en pregones populares porque ha asistido a muchos acompañando a su esposa Mariluz, también antigua amiga y bella concejala donde las haya habido en Baza. Él se encuentra aquí presente y se llama Antonio Plaza, aunque por algún capricho infantil nosotros le llamábamos “el Centenil”. Como recordaréis, ya ha aparecido en el texto leído por nuestro alcalde. Él  fue quien  en conversación telefónica, después de ponerme a parir siguiendo las pautas lingüística de su educado estilo verbal aprendido en el Barrio de Santiago y que está plagado de tacos, me fijó unos objetivos claros y me indicó, en general, lo que debía hacer. Estas fueron su palabras casi exactas ¿o no Plaza?:  “Míguel, lo que tienes que hacer es un pregón divertido, rápido que no sea un tostón, como tantos que he oído y en el que se vea claramente que no eres un “paracaidista” caído del cielo sino un bastetano de pura cepa” Él es, pues, la transparente inteligencia que guía los pasos de mi inteligencia pregonera obtusa y ciega. Y lo digo en serio: Plaza tiene toda la razón  (Observación: transparente inteligencia/Plaza cristalero, explicar) .

3ª) Teniendo en cuenta la apatía del público de Baza muy reacio a aplaudir, especialmente a la Banda de Música y espontáneamente… a nada y sí, a criticarlo todo, entonces yo que dirijo este pregón he pensado que os indicaré, apáticos conciudadanos, cuando hay que aplaudir por si os quedáis “pasmaos” con las manos en los bolsillos cuando haya que hacerlo para dar brillantez a este acto (aquí va explicación del procedimiento para indicar aplaudir con el bolígrafo de mi padre )

4ª) Finalmente me dirijo al Alcalde de Guadix, Jesús Lorente a los miembros de la Corporación que lo acompañan y a los ciudadanos hermanos de Guadix que os halléis presentes para deciros que este será un pregón inolvidable para ti, para todos los accitanos que te acompañan y para la ciudad HERMANA de Guadix en general. Porque nunca nadie en Baza ha defendido y quizá en muchos años nadie se atreverá a defender los intereses de Guadix y sus seculares aspiraciones religiosas, como lo voy a hacer yo aquí esta noche, siendo sin embargo un bastetano con raíces muy, MUY, profundas. Si son legítimos o no esos intereses y aspiraciones vuestros que dictaminen los jueces porque yo no lo soy; sólo soy un ex catedrático de filosofía de instituto, nada más. Pero muchas veces la filosofía adelanta en la historia lo que ha de venir y tal vez sea esta una de esas ocasiones únicas. Sólo la capacidad de pactar de las autoridades de ambas ciudades y de todas sus instituciones implicadas de ambas ciudades y el tiempo inexorable, mi gran aliado, dirán si he tenido razón o si estaba equivocado en lo que propondré al final.

He dicho que soy un bastetano con raíces muy profundas. ¿Cuáles son mis raíces? Vedlas. Mi nombre lo habéis oído ya pero lo que importa es mi primer apellido: desciendo directamente, como muchos otros aquí, de Hernando de Santaolalla, un caballero que tras la toma de la ciudad se instaló aquí con su mujer Isabel de Balbuena, tras los sucesivos repartimientos. Venía de lo que hoy es Santander y entonces se llamaba “Las Asturias de Santillana”, probablemente buscando un mejor futuro para sus hijos, como suelen hacer los padres cuando emigran. ¿Veis?¡Todos descendemos de personas que alguna vez fueron inmigrantes! Es esta gran enseñanza para los que rechazan ingratos a quienes llegan emigrando hacia nosotros.

Pues este Hernando, que ocupó durante un tiempo puesto en el Concejo de Baza, lo sé porque aparece repetidamente en las Actas capitulares de la época, junto a los Bocanegra, Vallejo, Quirós, etc. que aún suenan en Baza fue uno de los que decidió con toda seguridad que la Virgen de la Piedad se quedará aquí, si es cierta la leyenda de su hallazgo por el accitano Juan Pedernal.

Así que hoy, para hacer justicia histórica, otro Santaolalla –por cierto casado con una compañera tuya con más valor humano que yo, Mercedes Lozano, con la que te dejaste la piel como ella por la vida y la mejoría de tantos pacientes tantos años en el Hospital general de Baza‒ va a defender aquí otra cosa diferente a su tata-tatarabuelo que se verá al final.

Y bueno, si lo hago bien, pues nada preparad esa medalla que sé que tenéis de hijo adoptivo de Guadix si creéis que lo merezco, claro. La recibiré con gusto, si me la concedierais y si la recibo de las manos de D. Carlos Asenjo Sedano, pues eso ya sería lo más, vamos que la mandaría para que la colgaran en el Museo Municipal dentro de un marco dorado. Pero si no puede porque su salud flaquea ya, de las químicas manos de su hijo Carlos, vecino en Granada, compañero de instituto y buen amigo mío. Y si éste está ocupado montando en bicicleta como suele hacer, pues de las inocentes manos su nieta Alba, una criatura de una inteligencia como para quitarse el sombrero, que ha sido alumna mía y, como algunos antiguos alumnos míos, me quiere un poquititillo.

Pero claro, Jesús, antes hay que merecerla, así que luchemos para ganarla.

Y hechas estas aclaraciones, comenzaremos el pregón que será breve y espero que os resulte divertido como quiere que sea mi maestro y mentor Antonio Plaza:

2.Saludo a las autoridades

-Excmo. Sr Alcalde de Baza D. Pedro Justo Ramos Martínez

-Excmo. Sr. Alcalde de Guadix D. Jesús Rafael Lorente Fernández

-Excmo. y Rvdmo. Sr. Obispo D. Francisco Orozco Menjíbar

-Ilma. Sra. D.ª Josefa Martínez Talavera, Directora del Centro Asociado a la U.N.E.D. Pero que bueno, ese cargo en ti es lo menos importante porque para los bastetanos que hemos tenido la inmensa suerte de conocerte /…/[1] tú, para nosotros únicamente eres Pepi, la amable, la entrañable Pepi que dirige la U.N.E.D., /… /la hornillera Pepi de penetrante juicio, de inteligente mirada y /…/ alados labios de fuego.  (Breve aclaración de lo que significa “hornillera” y algunos datos sobre su pueblo Santiago de la Espada[2].)

y miembros asistentes e de las Corporaciones de Guadix y Baza.

Honroso grupo de autoridades de los Cuerpos de Orden Público, que hoy, en esta noche del 5 de septiembre de 2024 /…/

homenajearemos de un modo muy especial, y, aviso para maledicientes bastetanos ¡sin ninguna intención política por mi parte, mi intención es sólo humana! centrándonos en uno de esos cuerpos, sin que nadie, os lo aeguro, bastetanos y accitanos, de que los otros cuerpos se sientan minusvalorado por ello, porque es un cuerpo entrañable, representado aquí por el                                               ………………………………….,[3] un cuerpo que nos pertenece a todos y que en su himno contiene la siguiente estrofa

Instituto, gloria a ti

Por tu honor quiero vivir
Viva España, viva el Rey
Viva el orden y la Ley
Viva honrada la Guardia Civil

Y si canto esta primera estrofa de su himno hoy aquí es porque ese “instituto” perdió a dos de sus miembros el último 9 de febrero: a David Pérez Carracedo (de 43 años) y a Miguel Ángel Gómez González (con sólo 39). Los hechos que rompieron el corazón de cualquier español de bien ocurrieron, como bien se recordará en el puerto de Barbate, cuando en una lucha desigual, montados en una lancha de goma tipo zodiac más apta para salir a pescar que para la peligrosísima empresa a la que fue requerida y frente a una potente embarcación planeadora unos guardias civiles intentaron sin éxito detenerlos, entregando dos de ellos su vida por todos nosotros, es decir, por España entera. Y es por ese acto de heroísmo infinito, por lo que la ciudad de Baza y la ciudad de Guadix aquí hermanadas quieren rendirles un caluroso homenaje.

(Fuerte ovación)

Y, después de este pequeño homenaje, sigo:

Resto de autoridades civiles  cualesquiera que éstas fueren, de Protección Civil y del Cuerpo de Bomberos, así como representantes de las Hermandades Religiosas presentes y, muy en especial, dada la trascendencia de este acto, de la Hermandad de Nuestra Señora de la Piedad de Baza y de la Hermandad de la Virgen de la Piedad de Guadix Cofradías hermanadas desde tiempos remotos por el amor, a través de su venerada talla, a una mujer, dejémosla en eso, sin duda excepcional: la judía Miriam, hija de Ana y Joaquín, la esposa del carpintero Josef ‒luego seguramente su viuda porque el rastro de Josef se pierde en los Evangelios‒.

Pues bien a todos los mencionados, la  Muy noble muy leal y Excma. Ciudad de Baza que es a la que sirvo en este momento os da la bienvenida a este pregón anunciador de la Feria 2024.

  1. El origen de la Feria de Baza

3.1. La aportación del historiador Ricardo Cañabate Egea

Origen de la Feria de Baza, para Miguel Ángel Santa-Olalla.

Reconquistada Baza por los Reyes Católicos, la entonces Ermita de Santa María de la Piedad fue objeto de reconstrucción, en torno a 1490, por mandato de los propios Reyes, quienes emprendieron una campaña de restauración de las iglesias y ermitas de la ciudad y, en este caso, encargaron de ello al conde de Buendía y a su hijo, don Luis de Acuña, primo de doña María de Luna, cuya familia construyó la capilla mayor, lo que daría paso a la construcción posterior de la Iglesia‐convento de la Merced.

Crónicas y documentos de época de los propios religiosos de la Orden de la Merced, apuntan a su fundación entre 1502-1507, figurando ya la imagen de la Virgen de la Piedad en un inventario de 1504. Monjes que obtuvieron la cesión de la ermita en el año 1523, entrando a servir allí cinco religiosos “de ejemplar vida”, quienes iniciaron la reconstrucción del actual convento e iglesia dedicada a la Virgen de la Piedad, cuya festividad fue la que dio lugar, unos años más tarde, a la petición de una feria para Baza, precisamente promovida por los mismos frailes.

De esta forma, en el año 1578 llegaba la petición de la orden mercedaria al Concejo de la ciudad, a fin de lograr que una feria que dispusiera de franquicia en el pago de los impuestos, para cuya gestión  se designó a fray Diego de los Ríos quien, en 1580, recibió esa encomienda y se dirigió a la Corte de Felipe II con la misión de realizar esta petición que, como queda dicho, gozaba de los apoyos y parabienes del Concejo y consistía en demandar el beneplácito para celebrar una feria anual de ganado, de 17 días de duración, de los que ocho serían antes de la Festividad de la Virgen y otros ocho posteriores a la misma. No debieron ir mal las gestiones realizadas, cuando la petición fue aceptada por Felipe II, en 1583

Una petición para la que poco más tarde, con fecha de 31 de julio de 1597, lograron el Real Privilegio que les daba la exclusividad de la feria en cuanto a su ubicación, debiendo instalare en el entorno de la Plaza de la Merced y la actual calle de la Zapatería, lo que facilitaría mejor la asistencia a los cultos y produciría más rendimientos económicos, a la par que impedía las actividades comerciales en otras zonas, como la Plaza Mayor. Gracias a todo ello, se convirtió en una de las más importantes ferias de la zona, lo que generó un poder económico bastante notable, desde sus inicios y a lo largo del siglo XVII.

Por otro lado, la celebración de la feria en esas fechas supuso que se diera una importante coincidencia: la época final de las labores agrícolas y la llegada del tiempo dedicado a comerciar con los productos obtenidos, así como la compra y venta del ganado que propiciara las tareas en estaciones venideras, antes de que el frío invierno se echase encima.

(Fragmento de un correo electrónico remitido al autor del pregón por Ricardo Cañabate)

3.2 Aportación del historiador Juan Antonio Díaz Sánchez y María Castaño Jiménez

Una de las ferias más largas de toda Andalucía, la de Baza, cuya celebración se remonta a la segunda mitad del siglo XVI. En ella se aúnan tradición, costumbre, diversión, fraternidad, amistad… La feria en Baza se celebra en honor a la copatrona de la ciudad, Nuestra Señora la Stma. Virgen de la Piedad, que a lo largo de la historia ha sido custodiada en la ciudad de Baza por dos órdenes religiosas. La Orden de la Merced desde 1521 atendiendo a las cláusulas testamentarias de don Luis de Acuña −pariente de los Enríquez, capitán y maestresala de los Reyes Católicos, señor de la villa de Agromonte, caballero profeso de la Orden de Santiago, comendador de Mora de la provincia de Castilla y Trece de la misma orden− hasta 1836 año en que fue exclaustrada por la desamortización de Mendizábal y desde 1897 hasta el 2008 por la Orden Franciscana de Murcia. Hasta hace cuatro años, fueron los Padres franciscanos los que se hicieron cargo a la custodia y mantenimiento de la sagrada imagen de la Virgen de la Piedad y del antiguo convento de la Merced que es una auténtica maravilla arquitectónica, una verdadera joya artística que tiene la ciudad de Baza. Éstos tuvieron que dejar de ser los guardianes de dicho convento debido al avanzado estado de edad de los frailes que habitaban y predicaban en el convento de la Merced y a la falta de vocaciones. Esta situación obligó al Padre Superior de los franciscanos de Murcia, con todo su pesar y dolor, a tener que retirar la presencia franciscana de la ciudad de Baza. Inmediatamente el antiguo convento mercedario pasó de nuevo a manos del Obispado de Guadix-Baza y en la actualidad está convertido en un santuario que necesita un rector pero que no lo tiene por la misma razón que los franciscanos hubieron de marcharse, la falta de vocaciones. Monseñor Ginés García Beltrán –por la Gracia de Dios y de la Sede Apostólica, Obispo de la Diócesis de Guadix-Baza− ha invitado a varias órdenes religiosas para que se encarguen de la guarda y custodia del convento, ojalá y alguna de ellas escuche con diligencia y dé respuesta afirmativa a la proposición que tan generosamente ha sido realizada por el Sr. Obispo.

La Orden de la Merced tuvo en Baza un indiscutible poder económico a partir de la segunda mitad del siglo XVI y, por supuesto, durante todo el siglo XVII que, digamos, fue su siglo de esplendor. Los mercedarios bastetanos, guardianes del templo santuario de la virgen de la Piedad, tuvieron la concesión de una feria de ganado anual que se celebraba en las inmediaciones del convento −en el barrio de “Churra”− del 8 al 15 de septiembre, por concesión del rey Felipe II. Al poco tiempo de la toma de Baza por los Reyes Católicos, el Concejo de Baza solicita la celebración de una feria franca para el desarrollo de la ciudad. Sin embargo, los Reyes Católicos dan un aplazamiento hasta que no estudien con detenimiento el tema de las ferias en el Reino de Granada. Unos años más tarde el Concejo se implica en la organización de la fiesta de “Nuestra Señora de septiembre”. Una vez establecidos los frailes mercedarios en Baza con el objetivo de impulsar el culto y la devoción popular a la Virgen de la Piedad ven conveniente la celebración de una feria en el mes de septiembre, máxime cuando por esas fechas los agricultores ya habían terminado las labores de recolección y necesitan intercambios comerciales con animales y ganados para poder pasar el invierno. Los frailes proponen al Concejo, en 1578, conseguir de la Corona una auténtica feria con franquicia de impuestos. Para ello, en 1580 envían a su Comendador, fray Diego de los Ríos, a la Corte de Felipe II. Esta petición también está apoyada por el Concejo que hace todas las diligencias posibles para conseguir dicho objetivo. Finalmente, en 1593, la Corona concede la celebración de la feria y la fecha del 8 al 15 de septiembre. En ella se entrelazan el culto a la Virgen de la Piedad, la feria de ganado, la de mercaderías y los festejos taurinos. La feria de Baza en poco tiempo llegó a ser una de las más importantes dentro de la zona norte del Reino de Granada. Por Real Privilegio de 31 de julio de 1597 los frailes mercedarios obtienen la exclusividad de que la feria se celebre en la plaza de la Merced y la calle aledaña de la Zapatería con dos objetivos; uno el de promover mucho más el culto y devoción a la Virgen de la Piedad, otro el económico puesto que al celebrarse en esta zona podrían sacar muchos más beneficios económicos que si la feria se celebraba en el centro neurálgico de la ciudad que era la Plaza Mayor.

(Fragmento tomado del artículo de Juan Antonio Díaz Sanchez y de María Castaño Jiménez, “La Santísima Virgen de la piedad, “Cascamorras” y la Feria de Baza”)

  1. Nuestra mejor Feria (1976) y la figura señera de D. Luis Morcillo Vita
  1. Intervención de D. Luis Morcillo en nuestra feria de aquel año: su llamada a nuestro grupo de amigos para que organizáramos las actividades deportivas culturales realizadas (Síntesis de lo que hicimos)
  2. La figura histórica y humana de D. Luis Morcillo
  3. La apertura de su despacho de la alcaldía a la ciudadanía
  4. Sus ideas sobre la política de concepción maquiavélica y su concepto de lo que es un alcalde
  5. El ejemplo de su conducta: su abrazo a la vuelta del exilio al histórico dirigente socialista bastetano Sebastián Pérez y su correspondencia con él durante su exilio en Argelia El encuentro de los dos amigos en la oficina de la Caja Rural, presenciado por el pregonero y su padre (Sebastián Pérez y Luis Morcillo)
  1. Una reflexión breve sobre los vicios de la población de Baza que lastran su vida social y económica:

– La envidia. Definición: Tristeza o pesar del bien ajeno

– La maledicencia. Definición: hábito de maldecir, murmuración chismorreo ; “abejorreo de voces” (metáfora perfecta y original de Piedad Hernández en su libro Las mentas del verano)

– La apatía. Definición: impasividad de ánimo, indolencia, dejadez.

 Propuestas finales

5.1. La cuestión de la riqueza suntuaria y muerta de la Iglesia Católica Romana, acumulada durante dos mil años por sus instituciones de culto. La crítica evangélica de esos excesos inaceptables (Citas textuales del Nuevo Testamento) y  la necesidad cristiana de eliminarla, socorriendo la pobreza del mundo.

Y have a dream (M. Luther King)

5.2. La introducción de un turno de posesión alternativo de la imagen original de la Virgen de la Piedad, compartida entre Baza y Guadix.

– Aspecto cultural del planteamiento propuesto

– Bases teológicas (mensajes extraídos de los Evangelios)

– Necesidad socio-económica de una fusión de intereses entre la comarca de Baza  y Guadix cuyo símbolo sería esa posesión compartida de la venerada imagen

  1. Canciones y vítores modificados

6.1 Canciones[4] La atractiva feria de Baza que convoca a sus hijos que se han dejado en Baza una parte de sí. Versus Sevilla.

-Cuando salí de Baza

-El viento guarda silencio

6.2. Vítores modificados

Al Cascamorras:

Deseándole /…/vivamente/…/ suerte esta vez por fin/…/ en su desigual carrera por ganar a la Virgen para Guadix…

¡Que viva el Cascamorras que cada año con fe renovada nos envían nuestro amigos accitanos desde el final del lejano siglo XVI!

A la Virgen de la Piedad:

“Viva la virgen de la Piedad, La virgen de Baza y de Guadix ¡Que nunca se olvide ni allí ni aquí! Viva esa madre piadosa, la más piadosa de todas as mujeres y la que por la cruel muerte de su revolucionario hijo Jesús, se convirtió en la más sufriente de todas las madres.”

 

Cuando salí de Cuba/Baza – Luis Aguilé

Cuando salí de Baza
dejé mi vida, dejé mi amor,
cuando salí de Baza
dejé enterrado mi corazón.

Nunca podré morirme,
mi corazón no lo tengo aquí.
Allí me está esperando,
me está aguardando a que vuelva allí.

Late y sigue latiendo
porque la tierra vida le da,
pero llegará el día
en que mi mano le encontrará.

Cuando salí de Baza
dejé mi vida, dejé mi amor,             bis
cuando salí de Baza
dejé enterrado mi corazón.

Una triste tormenta
te está azotando sin descansar.
Pero el sol de tus hijos
pronto la calma te hará alcanzar

Cuando salí de Baza
dejé mi vida, dejé mi amor,             bis
cuando salí de Baza
dejé enterrado mi corazón,

mi cora-zón, mi corazón.

 

El viento guarda silencio

El viento guarda silencio
soplando en San Sebastián.
La Virgen está dormida,
la Piedad está dormida
y no la quie-re despertar.

Un carretero que viene
llamado Juan Pedernal,
lleva-en el toldo pintada,
lleva-en el toldo pintada,
la Virgen de la Piedad.

Besos de nieve cuajada
lleva el aire de las Sierras.
En Guadix Sierra Nevada
Y en Baza-á, en Baza-á..
El Calar de san-ta Bárbara.

Con trigo viene cargado
de la vega de Guadix
pa´ la Virgen de Guadi-ix,
que-es la Virgen de Baza

Dos besos traigo en los labios
pa´ mi Virgen, mi Piedad.
Uno recao-de mi madre,
uno recao-de mi madre,
y otro de mi soledad.

 El viento guarda silencio
en el barrio de San Juan.
La Virgen está dormida,
la Piedad está dormida
y no la quiere despertar.

 

[1] A lo largo de este guion el símbolo de pausa que emplearemos en la exposición cuando esta sea retóricamente preceptiva será el siguiente: /…/.

[2] Los primeros asentamientos que dieron lugar a Santiago de la Espada se remontan al 9250 a. C. habiendo localizado una comunidad primitiva que vivía de la caza del corzo el ciervo y el jabalí entre otra fauna de montaña. Y lo más interesante para los bastetanos que quieran seguir la fiesta el día 15: En Santiago de la Espada hay una feria ganadera que dura desde el 15 al 17 de septiembre. Y a los aficionados al baile, informaros que el día 16 por la noche se celebra una verbena popular muy animada. ¿Nos supera o no en antigüedad Santiago de la Espada? Por goleada, ya que Basti, la antigua Baza se originó entorno al siglo VI a. C.

[3] Desplazado este humilde pregonero al Cuartel de la Guardia Civil en la mañana del día 4 para que confirmasen la presencia en el acto de alguna autoridad representado al Benemérito Instituto, fundado por el Duque de Ahumada, no pudo concretarse el nombre y el cargo de quien ostentaría tal representación.

[4] En folios siguientes.